miércoles, 6 de febrero de 2008

Caminando por la orilla del mar a la noche, miraba la luna, después las luces y luego algun que otro grupito de jovenes ebrios en camino hacia algun bar. Busqué a mí compañero, pero habia aterrizado a unos metros atrás. Decidi seguir flotando por al lado de esa gaviota multicolor, que, quien sabe por qué razón, se le ocurrió sobrevolar a oscuras.
Muy poco me importaba (Y me importa) estar solo o acompañado.
Mientras que el viento sopla, al agua empuja, provocando una ola que en la orilla se hace espuma. Ya estoy aterrizando, y se humedecen mis zapatillas, pierdo la nocion del lugar y tambien del tiempo. Perdiendo el control me siento en la arena, y miro hacia el cielo. La gaviota es perseguida por un gran cardumen de peces que ahora vuela con ella, para ver las estrellas más de cerca.
Amaneció, y pa casa me voy, esta vez caminando, porque libre ya no soy.

3 Opinaron:

Anónimo dijo...

Muy buena onda eso
\\Eber//

Alejandro the Kitsune-san dijo...

BUENO TU BLOG YO CONOCI UN TIPO QUE A SU HIJO LO LLAMO ENZO FRANCESCOLI ASI ENTERO

Anónimo dijo...

me encanto este texto

muy bueno

se nota que estuviste escuchando mucho a los Beatles...

Abrazo, cuando nos vemos che?

...:::HpeO:::...